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MEDIO AMBIENTE

El proyecto CES para controlar las colonias de gatos se extiende por Aragón

Este método de captura, esterilización y suelta paraliza la reproducción descontrolada de los felinos y los aleja de los núcleos urbanos para minimizar las molestias

L.QUÍLEZ /
Varios gatos en pleno núcleo urbano. / Pixabay
icono foto Varios gatos en pleno núcleo urbano. / Pixabay

Capturar, esterilizar y soltar. Esas son las máximas del Proyecto CES, al que cada vez se suman más localidades de Aragón. Su objetivo: gestionar y evitar la reproducción de las colonias de gatos en las localidades para minimizar las molestias que ocasionan en la ciudadanía. 

El procedimiento C.E.S. (en inglés TNR, 'Trap-Neuter-Return') se está extendiendo a nivel internacional por sus muchos beneficios: además de proteger las colonias felinas y frenar su reproducción descontrolada, este método ayuda a crear un censo de animales de cada zona. Todo ello facilita la convivencia entre animales y ciudadanos, y ayuda a corregir y reducir los problemas que causan estos animales en las localidades.

Este proyecto se basa en atrapar a todos o la mayoría de los gatos de una colonia (especialmente las hembras), esterilizarlos y devolverlos a su territorio marcados con un corte en la oreja para identificarlos como estériles. También existe la posibilidad de construir emplazamientos fuera de los núcleos urbanos, en lugares apartados y sin viviendas cercanas, donde los animales pueden alimentarse y resguardarse. 

¿Dónde se realiza el CES en Aragón?

La capital aragonesa, inspirada por la buena experiencia de otras ciudades españolas y europeas, fue pionera en la Comunidad a la hora de adoptar el proyecto. Comenzó en 2012 y a día de hoy cuenta con 61 colonias felinas, ubicadas en la periferia, en las que conviven miles de gatos. "Es una situación muy complicada porque el número de animales en nuestra ciudad es muy alto, y es difícil controlarlo", explica el consejero de Participación y Relaciones con los Ciudadanos del Ayuntamiento de Zaragoza, Javier Rodrigo. "Nuestro objetivo es lograr una buena convivencia de los gatos en el municipio en unas óptimas condiciones y que su censo sea en un principio lineal, y después se vaya disminuyendo poco a poco", añade Rodrigo. 

En 2016 se hizo un censo, en el que se contabilizaron 450 gatos en Zaragoza y, debido a su reproducción descontrolada, en 2019 la cifra aumentó en un 600%, hasta los 3.500. Una cantidad que cuesta reducir, asegura Rodrigo: "Hemos tenido que reforzar este proyecto y los recursos destinados a la esterilización para controlar todo esto". El problema, añade, es que son muchos los ciudadanos que no cumplen las normas y los alimentan fuera de las colonias y sin ser voluntarios certificados, lo que fomenta su reproducción. Para lograr una esterilización gradual de los animales, el Consistorio ha firmado un convenio con varias clínicas privadas, con la Facultad de Veterinaria y el Colegio de Veterinarios de Zaragoza. Actualmente, el Ayuntamiento destina 58.000 euros al Proyecto CES. 

"Esto no se hace simplemente por un sentimiento animalista, muchos consistorios buscan ser prácticos y solucionar un problema que es muy difícil de controlar", explica David Martínez, de la Asociación Proyecto CES Aragón. "Esta situación de superpoblación felina es algo que se repite en todas partes y que no tenía solución hasta ahora. El CES es lo más apropiado y útil, por eso debemos castrar", añade. Esta agrupación viaja por toda la comunidad dando charlas sobre este sistema e intentando animar a los Ayuntamientos a que apuesten por él. "Nos alegra decir que cada vez son más los que están interesados porque se dan cuenta de su eficacia viendo los resultados en las localidades vecinas". 

Una de las colonias instalada a las afueras de Escatrón / Ayuntamiento de Escatrón

En la provincia de Zaragoza son muchos los ayuntamientos que apuestan por este programa, como La Almunia de Doña Godina, Cariñena, Utebo, Almonacid de la Sierra, Morata de Jalón, Pinseque, Calatayud, La Puebla de Alfindén, Villanueva de Gállego, Pastriz, San Mateo de Gállego, Zuera, Cadrete o Escatrón. El consistorio de este último municipio, motivado por quejas vecinales ante el aumento de los gatos callejeros, decidió iniciarlo en 2021. Concretamente, allí cuentan con seis emplazamientos para las colonias que se han formado.

Gracias al convenio con una veterinaria de un municipio cercano, se han esterilizado 40 gatos (20 machos y 20 hembras) y, según su concejal Pilar Clavero, "ya se está notando la disminución de animales por las calles, aunque sabemos que es algo progresivo y que será a largo plazo, pero ya empezamos a ver resultados". Cuando el Consistorio propuso esta iniciativa a la ciudadanía, muchos fueron los que quisieron colaborar de forma desinteresada: Escatrón cuenta con 25 voluntarias que adecentan y dan de comer y beber a los gatos a diario. El Ayuntamiento ha destinado una importante partida presupuestaria para la alimentación y la esterilización, y cede de manera gratuita suelo municipal. 

El último pueblo en incorporarse a la lista de la provincia de Zaragoza ha sido La Muela, hace poco más de mes y medio. Allí ya han conseguido castrar en ese tiempo a 43 gatos. 

Un gato comiendo en un comedero instalado de una de las colonias constituidas a las afueras de Escatrón. / Ayuntamiento de Escatrón.

En la provincia de Huesca, localidades como Monzón, Biescas, Aínsa o Barbastro (que empezó en mayo de 2022),  también están llevando a cabo el proyecto CES. El alcalde de esta última localidad, Fernando Torres, señala que ha sido una gran decisión porque "muchas colonias estaban descontroladas". "Necesitábamos una acción que parase su incremento, y la verdad es que lo estamos notando mucho", añade Torres. Actualmente cuentan con unos cuatro emplazamientos donde los voluntarios les dan de comer y beber, y desde los que se les recoge para esterilizar. Han destinado unos 6.000 euros para tal fin. 

En Huesca capital, los inicios del proyecto se remontan al año 2014. La información más reciente que posee el Ayuntamiento muestra que actualmente en la ciudad hay más de 280 gatos, repartidos en cerca de 40 colonias. Existe un contrato de Servicio de Control de las colonias felinas sin propietario, en el término municipal, que cuenta con un presupuesto de 10.200 euros anuales.

En Teruel, también son muchos los ayuntamientos que apuestan por el programa, como Utrillas, Alcorisa, Andorra, Estercuel, Ariño, Mas de las Matas, Alcañiz, Foz Calanda o La Fresneda. Para realizarlo, en este último municipio el Ayuntamiento se ha asesorado con asociaciones de la zona. "Nos pidieron ayuda para solucionar el problema que tenían en la parte más céntrica, donde había un gran volumen de gatos que no dejaba de crecer, y a día de hoy, hay hasta seis colonias instaladas en las afueras, por lo que la convivencia entre vecinos y animales ha mejorado mucho", comenta Sandra Elías, de la Asociación Bajo Aragón Animalista. "El Ayuntamiento nos ha facilitado mucho el trabajo y colabora con nosotras activamente", añade Elías.