Desmantelado un 'supermercado de la droga' en un piso de Zaragoza

La Policía Nacional ha detenido en Zaragoza a un hombre de 28 años y a una mujer de 45 tras un registro en una vivienda del centro de la ciudad con el que da por desmantelado un 'supermercado de la droga'. Los implicados pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, que ha decretado su ingreso en prisión.

Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Aragón,  en el registro fueron intervenidas 61 pastillas de orfidal, 47 de MDMA, 9 sellos de LSD, 12,3 gramos de speed, 15,6 de marihuana, 3 de cocaína y 4,7 de hachís, con lo que el piso era un "auténtico supermercado de la droga" en el que el consumidor podía adquirir cualquier tipo de sustancia.

Los agentes constataron que se trataba de un punto de venta de droga al menudeo y en el registro de la vivienda, el pasado jueves día 22, el detenido manifestó que todo lo que había en el domicilio era de su propiedad e indicó el armario en el que guardaban las drogas.

Las investigaciones se iniciaron meses atrás cuando el Grupo de Tráfico Minorista de Estupefacientes de la Comisaría de Distrito Centro tuvo conocimiento de que en un domicilio de la Calle Doctor Blanco Cordero número 9 se podría estar distribuyendo droga al por menor.

Los vecinos: "Todos los días entran personas desconocidas"

Fuentes vecinales han relatado a Aragón Noticias la "dificultad" de convivir en un inmueble con un constante tránsito de personas ajenas al edificio y que ha motivado varios episodios de violencia derivada del menudeo de droga. "Prácticamente todos los días hay personas desconocidas que entran en el portal para comprar droga", aseguran, para destacar algún suceso protagonizado por alguno de los clientes, que al no encontrar a los suministradores en su vivienda, destrozaron cristales de la escalera el pasado mes de febrero. 

Asimismo, han asegurado que dos "mujeres mayores" se han mudado a otros domicilios por el miedo de vivir allí. También detallan que ha habido enfrentamientos violentos entre la expareja de la mujer detenida y algunos de los clientes, lo que dificulta "enormemente" el tener una vida normal en el edificio.