Una Segunda RFEF con mucho sabor aragonés

La Segunda Federación volverá a contar con seis equipos aragoneses el próximo curso. CD Teruel, CD Brea, SD Tarazona, CD Ebro, Utebo FC y Deportivo Aragón serán los representantes de nuestro fútbol, en un año que se presenta emocionante para el amante del fútbol aragonés. Todo gracias a las buenas actuaciones de varios de ellos en el curso 21-22. Eso sí, el final menos deseado fue para el Club Deportivo Teruel, cuarto en la liga regular y que disputó el play-off para ascender a la Primera RFEF. Rozó el ascenso, pero la derrota ante el Mérida en la prórroga de la final le privó del sueño de jugar la próxima temporada en la categoría de bronce. 

Ahora, de nuevo en Segunda RFEF, el proyecto turolense será continuista: una de sus primeras noticias ha sido la renovación de Víctor Bravo, que ya les ascendió en 2021 desde Tercera División. "Los valores que transmite el equipo de esfuerzo, de compañerismo, de ser una familia, une mucho a la gente de Teruel y el resultado es este, que aunque no hayamos ascendido, todo el mundo contento y todo el mundo reconoce ese gran equipo que somos", le afirma a Aragón Deporte. 

Más amable fue la cara de un Utebo FC que logró un ascenso histórico gracias a su empate a 1-1 ante el Almería B en la final del play-off. El conjunto utebero ya había jugado en Segunda B en los años noventa, y ahora les llega un reto apasionante. El de crecer como club en una categoría mucho más competitiva que la Tercera. "Nos hace una ilusión tremenda, llevamos un año sólo en la directiva y este año ha sido un reto y el año que viene va a ser lo mismo pero con más ilusión aún", le cuenta Alfonso Orcajo, presidente del equipo, a Aragón Deporte. Y es que la quinta ciudad de Aragón por habitantes quiere dar que hablar en su nueva categoría. 

Le acompañará un Deportivo Aragón que logró el billete directo tras quedar campeón de su grupo. Brea y Tarazona lograron la permanencia tras un año muy intenso, al igual que un Club Deportivo Ebro en crecimiento que se quedó a las puertas del play-off en un año en que además logró jugar en la Romareda ante el Celta de Vigo en Copa del Rey. La cruz fue para la Sociedad Deportiva Ejea y la SD Huesca B, que certificaron su descenso a Tercera después de una temporada con muchos altibajos.