Nolasco: "Todo el mundo puede ganar a cualquiera y cada punto hay que trabajarlo muchísimo"

Bada Huesca cerraba el pasado sábado la primera vuelta de la Liga Plenitude Asobal y lo hacía en duodécima posición, cuatro puntos por encima del descenso. Ha sido un primer tramo de la competición con muchos altibajos, especialmente jugando como locales con sólo dos partidos ganados de los disputados.

Su técnico José Francisco Nolasco pasó por Aragón Deporte para hacer balance de estos primeros meses de competición y empezó por valorar el último empate sumado ante Cangas. Lo calificó como victoria, pues el equipo perdía por 4 goles a cinco minutos del final: "Fue muy loco, a la afición le gustan este tipo de encuentros todo corazón aunque al resto nos guste tener todo más controlado". En cuanto al balance general reconoció que era "complicado hacerlo con un grupo que estaba creciendo en una liga competida como es este año la Plenitude Asobal". Hay que recordar que este año la plantilla cuenta con siete caras nuevas en relación al pasado año.

"Si se mira la clasificación, no hay mucha diferencia de puntos. Si ganas dos partidos, te sitúas séptimo y si pierdes luchas por no descender. Todo el mundo puede ganar a cualquiera y cada punto hay que trabajarlo muchísimo". Incidió en lamentar "la sensación que tenía en muchos partidos de haber dejado escapar puntos, haber hecho algo más, para sumar puntos que nos hubieran hecho estar más arriba en la clasificación".

Puso especial énfasis en destacar que son un bloque cargado de juventud, con muchos jugadores debutantes en la categoría y sin un jugador referencia en el que prevalece el valor del equipo. Con vistas a la segunda vuelta admitió "tener que dar un pasito más". Confía en la segunda vuelta poder dar ese paso adelante, al tomar como referencia los últimos partidos y las sensaciones ante rivales importantes.

La segunda parte de la temporada se afronta "con mucho optimismo y conscientes de tener mucho trabajo que hacer", algo que ya sabían desde principio de temporada. Durante el parón toca trabajar a nivel colectivo, pero también a nivel individual para "mejorar la calidad técnica y táctica de cada uno de los jugadores, para empezar ganando en casa a un rival al que ya se derrotó.