Publicidad

Cristian Álvarez se disfraza de ángel para salvar al Real Zaragoza con un gol para el recuerdo

Un heroico Cristian Álvarez rescata al Real Zaragoza de encajar una dura derrota en Lugo con un golazo de cabeza

Manu González /
Momento del 2-1 del Lugo. Imagen: LaLiga.
icono foto Momento del 2-1 del Lugo. Imagen: LaLiga.

Pasará a la historia y, seguramente, haya ayudado a salvar la existencia del Real Zaragoza. Cristian Álvarez es un tesoro. El portero argentino se disfrazó de ángel para rescatar un punto en Lugo, en un partido que comprometía mucho a su equipo. Cuando pocos creían, cuando ni Alegría ni Vuckic, ni ninguna de las torres blanquillas podía empatar un partido que se iba con dos a uno al marcador, el portero tuvo fe. Metió la cabeza donde muchos no llegan y conectó un auténtico testarazo para llenar de lágrimas los incrédulos ojos del zaragocismo. 2-2 en el 96, en un partido en el que el Real Zaragoza jugó mejor que su rival pero encajó un gol muy duro en la recta final. Cristian tuvo el coraje de creer en los milagros para hacer un gol para mirar una y otra vez en el futuro. Al igual que con Nayim en el 95 (con todas las distancias que salvar), bendita fe la del ángel Cristian.

Un encuentro que nació plomizo, sin fluidez ni apenas pases. Una sucesión intrascendente de balones sin destino, fueras de banda y continuas interrupciones. Los dos equipos iban a más de una pérdida de balón por minuto en un inicio de partido que no acababa de romper. Fútbol de trincheras, de bombeos aéreos y unas defensas que impedían cualquier arrebato de inspiración de los atacantes. En uno de los balones parados enviados al aérea lucense por Zapater, Pita despejó de cabeza y el balón le cayó a un Peybernes que chutó muy desviado. Fue en el minuto 25 de un inicio intrascendente justo antes del primer susto local: Chris Ramos condujo un contragolpe y le cedió el balón a un Hugo Rama que disparó con muy mala intención en la frontal y solo el talón de Nieto evitó que fuera a puerta. Azón respondió con un cabezazo que no cogió puerta tras un excelso centro de Zapater. Una gran triangulación entre Bermejo, Nárvaez y Vigaray que despejó Varo con los puños; y un latigazo del activo Bermejo fuera por poco, fueron las dos mejores llegadas del Zaragoza en la primera parte.

Fue el preludio del bofetón de la noche. Un córner dudoso -pues Hugo Rama se echó un balón en largo ante Francés y el balón se le marchó fuera sin que pareciera que lo había tocado el canterano- significó el uno a cero. Manu Barreiro cogió carrerilla para imponerse a Azón y Peybernes y fusilar a Cristian con un brillante cabezazo. Tocaba salir a por todas en la segunda parte, pero el Zaragoza siguió sufriendo para generar, aspecto que fue corrigiendo con el paso de los minutos. El equipo aragonés fue acrecentando su posesión (con picos del 80%) y adelantando sus líneas. En el minuto 58 Nárvaez, tras una pared con Adrián, fusiló desde la frontal a un Varo que tuvo que meter fuerte las manoplas. Fue el mismo portero local el que protagonizó la siguiente jugada, cuando al ir a despejar un balón se llevó por delante el rostro de un oportuno Azón. Monescillo, tras no haber pitado una mucho más clara del mismo Varo contra Peybernes, decretó la pena máxima; Adrián la transformó con la tranquilidad de quien lleva más de una década en este oficio.

Con el uno a uno el partido entraba en un nuevo escenario. Azón tuvo el gol tras un frentazo a saque de córner que atrapó Varo sobre la línea de su portería. Eguaras entró por el activo Zapater y el Zaragoza siguió acechando la portería rival. Nárvaez la tuvo de cabeza, lo mismo que Adrián tras un gran centro de Nieto: el autor del penalti vio cómo le sacaba el defensa el balón bajo los palos. Eran los mejores minutos del partido pero, incomprensiblemente, cuando mejor estaba el club aragonés, el Lugo marcó el segundo. Una jugada aislada en ataque acabó en córner: en el lanzamiento, un error de marca provocó que Venancio marcara tras un rechace. Un jarro de agua fría, cuando mejor estaba el equipo, cuando más atacaba, cuando más buscaba el triunfo. Vuckic y Alegría entraron en la recta final para meterle metros y fuerza física al ataque. Varo le hizo un paradón a una mano a Eguaras tras un chutazo del navarro en unos últimos minutos en que el equipo aragonés acabó volcado sobre el área lucense. Parecía que ya no había esperanza y que el partido se iba, una derrota para sufrir... cuando Cristian Álvarez, un ángel, se dejó caer por el área para convertir la noche zaragocista en una fiesta. El argentino es un tesoro y Zaragoza lo sabe.

Ficha técnica:

CD Lugo: Varo; Alende (López, 89'), Venancio, Pita, Luis Ruiz; Hugo Rama (Torres, 89'), Juanpe, Seoane (El Hacen, 68'), Chris Ramos; Manu Barreiro y Cristian Herrera (José Luis Rodríguez, 74')

Real Zaragoza: Cristian; Vigaray, Francés, Peybernes, Nieto (Chavarría, 83'); Zapater (Eguaras, 70'), Francho (Alegría, 86'), Bermejo, Adrián; Narváez y Iván Azón (Vuckic, 86').

Goles: 1-0, Manu Barreiro 44'; 1-1, Adrián, de penalti 64'. 2-1, Venancio, 81' 2-2, Cristian Álvarez 96'

Árbitro: Arcediano Monescillo (Manchego). Amonestó a Varo, 62'; Peybernes, 68; Azón, 77'

Audios

Gol de Adrián (1-1)
Descargar
Gol de Cristian Álvarez (2-2)
Descargar

Audios

Gol de Adrián (1-1)
Descargar
Gol de Cristian Álvarez (2-2)
Descargar