Chilavert, en 'La Jornada', sobre su gol: "Toda La Romareda me pidió que lanzara el penalti"

28/01/1990. El Real Zaragoza le vence a la Real Sociedad por dos goles a uno en un partido que no habría quedado en el recuerdo de no ser porque su portero Chilavert hizo historia. Con 1-0 en el marcador, el portero paraguayo se decidió a lanzar un penalti en la recta final. Tras convertirlo con maestría, se fundió en abrazos con sus compañeros, demorando el tiempo de regresar a la portería. Craso error. La Real sacó rápido de centro y Goikoetxea marcó desde el centro del campo con la portería vacía. Era el minuto 89 y afortunadamente no dio tiempo para más. Aquella tarde pasaría a la historia como la única en que un portero zaragocista marcaba gol... hasta ahora.

La Jornada, de Aragón TV, tenía que ponerse en contacto con Chilavert dado que su nombre sonó con fuerza junto al de Cristian Álvarez durante todo el fin de semana: "La anécdota es tan rica que los aficionados del Zaragoza deben saberlo: salía mucho del área por mi estilo de juego, para pegarle pelotazos a Pardeza o a Sirakov y la propia afición zaragocista me gritaba: "¡Portero loco, quédate en la portería". (Fíjate en cómo juegan hoy en día los porteros, los grandes entrenadores no contratan a uno que no sepa jugar con los pies...) Convierto en el gol porque todo el estadio de La Romareda pedía que yo lo tirara. Mis compañeros habían fallado varios en una tanda de penaltis contra el Valencia y Radomir Antic me dio el aval...". Así lo rememoró el portero exzaragocista.

Respecto al gol de la Real Sociedad, Chilavert echó 'balones fuera'. "Fue Vilanova el que tenía que tapar la portería", arguyó con una sonrisa. Y es que el Real Zaragoza tuvo a una figura mundial en su portería, conocido por su habilidad en el extraño arte de marcar gol llevando guantes de arquero: "Marqué 70 goles, faltan algunos en la Wikipedia. Para mí lo importante es que hay que tomar en consideración el coraje y la determinación para ir a buscar ese gol y luego la técnica, el saber saltar y cabecearlo. Son situaciones que demuestran que Cristian estaba ante esa maravillosa oportunidad para saber aprovecharlo", explicó un Chilavert que remató con esta sentencia: "Lo importante es que he dejado un legado en el mundo del fútbol".