Casademont afronta en buena posición un tramo clave en la competición europea

La derrota de Casademont Zaragoza en Klaipeda ha cortado la buena racha del equipo, pero no debe dejar en ningún casa malas sensaciones. En un duelo marcado por las bajas, el equipo dio la cara hasta el final con jugadores muy jóvenes durante bastantes minutos sobre la pista. En esas condiciones, la derrota no debe tener mayor recorrido que un tropiezo por las condicionantes del partido. De hecho, Porfirio Fisac aseguró al final del encuentro que se iba contento con la entrega y el compromiso de sus jugadores.

De hecho, el balance del equipo hasta la fecha en la Basketball Champions League puede considerarse positivo. Tras las cuatro primeras jornadas de la fase de grupo, el equipo es cuarto (puesto que da acceso a los octavos de final) tras haber sumado dos victorias y dos derrota. Un balance que puede considerarse muy positivo teniendo en cuenta que tres de esos encuentros los ha jugado a domicilio, logrando llevarse la victoria de la pista del Besiktas.

En las próximas cinco jornadas el equipo afronta cuatro compromisos europeos en el pabellón Príncipe Felipe. Un tramo en el que el equipo tiene en su mano el poder afianzar su presencia en la zona alta del Grupo D, para asegurar su pase a los octavos de final como uno de los cuatro primeros clasificados. Entre el 12 de noviembre y el 18 de diciembre pasarán por la capital aragonesa Dijon (actual 1º), Brindisi (6º), Telekom Bonn (3º) y Besiktas (7º). Un tramo de la competición que se dibuja como clave para Casademont Zaragoza.