Una década de crónicas en Maluenda

Prohibido lavar ropa en la acequa Floriana y tirar las aguas a la calle. Blanqueo de las escuelas y limpieza de locales y objetos o miebles. Limpiar y barrer la calle todos los días, cada uno el trozo correspondiente a su vivienda. Limpiar corrales con estiércoles y sacarlos fuera del pueblo cada ocho días. Adquirir 100 cartillas de prescriciones higuénicas para distribuir en la escuela y entre vecinos de mayor edad.

Todas estas normas se aprobaron en la Junta de Sanidad del Ayuntamiento de Maluenda durante la epidemia de gripe de 1918. Lo sabemos gracias a la investigación en archivos que han llevado a cabo sus vecinos, y que les ha permitido rescatar, en los últimos diez años, episodios de la historia de la localidad en una fiesta ya declarada de Interés Turístico de Aragón: 'Crónicas de un pueblo'.

La décima edición llega en un momento complicado, con restricciones y la responsabilidad de no provocar aglomeraciones o salidas innecesarias, a causa de la emergencia sanitaria. Sin embargo, la Asociación Somos Maluenda y el consistorio, no han querido dejar de celebrar una década de trabajo dando a conocer su historia a vecinos y visitantes.

Para ello, han preparado una revista que recoge los momentos más destacados a lo largo de la última década de esta fiesta, y que podrán recordarse también en la exposición fotográfica organizada, con más de un centenar de imágenes.  Además, los integrantes de la compañía teatral El Trinquete, han preparado un audiovisual en el que los personajes de las obras de teatro recuerdan cómo han vivido sus particulares Crónicas desde 2011, y que podrá verse desde este viernes 23 de octubre a partir de las 20.00 a través del canal de Youtube de la asociación.

La historia

'Crónicas de un Pueblo' es una celebración que cada mes de octubre permite a vecinos y visitantes viajar a principios del siglo XX para recordar tradiciones y costumbres de nuestros mayores. Durante la última década, se han revivido escenas tradicionales como la matanza del cerdo, la trilla o la vendimia y el pisado de la uva, además de recordar episodios que han marcado la historia de la localidad, como la inauguración de las escuelas municipales por parte del cardenal Casanova, la llegada del ferrocarril o el centenario de la gripe española.

Para José Manuel Sancho, concejal de Cultura del consistorio e impulsor de la idea,  una de las claves del éxito de esta cita ha sido la "colaboración de asociaciones y grupos vecinales, que siempre se han mostrado muy involucrados, mediante la realización de demostraciones, talleres o juegos", explica en una entrevista en el programa 'El Tranvía Verde' de Aragón Radio.

Entre ellos destaca la representación teatral escrita y protagonizada por El Trinquete, uno de los momentos más esperados de cada año, que en 2019 reunió a más de 600 personas en el pabellón municipal. También destacan las comidas populares, superando en algunas ediciones los 1.000 comensales. En los últimos años además se han estrenado nuevas tradiciones, como el reconocimiento a los nacidos entre cada edición como los 'Galanicos del año' o el homenaje a personalidades destacadas, el año pasado, a los agricultores y ganaderos del pueblo.