Símbolos y misterio en el románico aragonés

Tras crear en 2002 la página web de Romanicoaragones, Antonio García Omedes ha querido reunir una parte importante de sus descubrimientos en su nuevo libro ‘El Románico Aragonés. Mirar viendo’. No se trata de su primera obra en papel, pero el propio autor se encuentra orgulloso de la misma: “A título personal es la que me ha dado más satisfacciones”, según afirma en el programa de La Torre de Babel de Aragón Radio.

Cirujano de profesión, García Omedes ha conseguido extender su pasión por el arte románico más allá del territorio aragonés. El escritor reconoce dos factores diferenciales que le ayudaron en su éxito: la aparición de las cámaras digitales y el gusto por este tipo de arte. El autor ha llegado a afirmar que todavía hace nuevos descubrimientos al visionar fotografías antiguas.

Respecto al arte románico, asegura que “es como recoger piezas de un puzzle que poco a poco te empiezan a encajar”. Considera que “cada día el románico tiene más amigos: a diferencia de otros, es un arte que engancha y que cada persona puede interpretar de una forma distinta”. También destaca la importancia de la formación religiosa para poder comprender mejor la simbología de aquello que observa.

Para el autor, la catedral de Jaca es un lugar fundamental para entender el arte románico ya que es el punto de inicio del Camino de Santiago y desde el cual se extiende este arte. Sobre la iglesia de Santiago de Agüero reconoce que “siempre encuentras algo nuevo, pero son más preguntas que respuestas. Hay tantas cosas que al final es un misterio”. También destaca la ermita de San Blas de Broto, de la que apunta que “todavía tiene incógnitas anteriores al periodo Visigodo”.

Finalmente, el escritor ha querido compartir algunas de sus experiencias más aventureras, como cuando vivió un episodio en el que no se le permitía el acceso a un templo para fotografiarlo y consiguió entrar utilizando la picaresca, o cuando tomó incluso más riesgos: “He llegado a utilizar una podadora para abrirme paso hasta algún templo”.