Música en las calles

La calle Alfonso de Zaragoza es su particular escenario estos días. Aunque cualquier rincón de la ciudad es bueno para mostrar su música a los viandantes. Andrés MacNamara explica que, lo que más le gusta de ser un artista "callejero" es "no saber quién te escucha, quién es la persona que se ha parado a verte y porqué".

Rompió el miedo escénico a tocar en la calle cuando trabajaba en Dublín. Años después, atesora un cúmulo de anécdotas, la mayoría de ellas buenas, que alimentan su sed de emoción, espontaneidad y de conocer a tanta gente diferente.

Además, reconoce que muchas oportunidades que le han llevado a escenarios han surgido en la calle. Por ejemplo, cuando tocó en Memphis con uno de los Wailers que acompañaban a Bob Marley. MacNamara sigue persiguiendo el sueño de vivir de la música, entre versiones de los Beatles y sus propias composiciones.