Las almas objetivadas de Rodd Teller

Una combinación de tierna sinceridad, casi poética, con una crudeza y actitud un poco punk. Rodd Teller es el nombre con el que se da a conocer un fotógrafo zaragozano cuya formación no es para nada académica pero que los expertos han definido como "fresca". 

Casi siempre trabaja con mujeres, "de una forma muy libre, sin imponer su visión, dejando que las sesiones fluyan de forma natural e íntima, buscando retratar la personalidad de la modelo", explica. Estas mujeres no son el objeto de la fotografía, sino el sujeto, sin miedo a mostrar su sexualidad, con seguridad.

Personas reales, sin filtrar y sin adornar porque usa cámaras de carrete y de película instantánea, que no permite retoques digitales en postproducción. De esta ingeniosa manera, Rodd pervierte nuestra mirada, pero también llama la atención de cómo al final la figura de la mujer, por mucho que digamos que “esta liberada”, continúa enjaulada y encadenada por los tabúes y prejuicios sociales, que es criticada de forma hipócrita por mostrarse como son, sin miedos.