La situación de las salas de conciertos en Aragón

El concierto del violinista Ara Malikian reunió a unas 700 personas en el Festival Castillo de Aínsa, el pasado sábado, 18 de julio. Paseándose por el mirador de la muralla, hizo sonar las primeras notas de un concierto impresionante. Abajo, en el escenario, lo esperaba su compañero, el pianista Iván “Melón” Lewis, ensamblando entre ambos piezas musicales aplaudidas hasta la saciedad.

"Las sensaciones fueron buenas, estamos recibiendo emails de personas dando las gracias de la excelente organización y del cumplimiento del protocolo de Sanidad a rajatabla", comenta Joaquín Domínguez, promotor de ZZ Producciones, la empresa encargada de la logística de este concierto y secretario de la Asociación Aragón en vivo en el programa 'Escúchate' de Aragón Radio.

Ahora, organizar un concierto de estas características, requiere "más esfuerzo y más dinero", pero Domínguez asegura que es un esfuerzo necesario para cooperar con la situación que vivimos. "El valor terapéutico de las dos horas que recibieron estas setecientas personas, no tiene precio", continúa el promotor.

Las salas de conciertos en la comunidad aragonesa

Además, Domínguez analiza la difícil situación de las salas de conciertos en Aragón y la problemática a la que se enfrentan: "Fuimos los primeros en cerrar y seremos los últimos en volver" y critica que, ante esta situación extraordinaria no se hayan tomado "medidas extraordinarias". 

Desde la Asociación Aragón en Vivo explican que hay comunicación con las instituciones pero sin llegar a concretar nada circunstancial y piden que se agilicen las ayudas.