La narrativa de las imágenes en el trabajo de Raquel Povar

La fotógrafa Raquel Povar siempre lleva a cuestas su cámara, no pasa un solo día sin dispararla. En sus imágenes busca composiciones equilibradas y que “transmitan sosiego”, explica en una entrevista en Atónitos Huéspedes de Aragón Tv. Está todo el tiempo pensando en fotos, “antes de tirar una la tengo en la cabeza”, dice, y en la postproducción apenas aplica brillo y contraste “pero están casi crudas, me gusta eso”.

Esta aragonesa autodidacta se considera una contadora de historias y para ella, la fotografía es una herramienta más. Retrata cosas, colores y también la vida y las personas. De hecho, su serie de retratos recoge artistas de la tierra como Santoral, con una música muy particular y surrealista, por lo que ella quiso con su cámara “captar la complicidad de ambos”. Lo mismo le ocurrió con Copiloto “tiene una atmósfera íntima y personal y me parecía que las fotos debían ser sobrias y elegantes como su música”, explica.

Las situaciones costumbristas también le sugieren muchas cosas y así surgió su serie de la playa. “Las playas me han dado situaciones fascinantes”, como narra en la entrevista. En cuanto a la foto de calle dice que “es más contemplativo de lo que pueda parecer, busco el sitio y espero a que en ese sitio pase algo que ayude a transmitir esa atmósfera”.