Krevi Solenco: "‘El rap es una herramienta perfectamente válida para expresarse en aragonés y contribuir a su visibilidad”

'Os Chardins de Shalimar' es el nuevo disco del rapero zaragozano Krevi Solenco. El primero de este género musical íntegramente en aragonés. En él, Solenco demuestra que la lengua aragonesa no solo sirve para hablar de las "cosas del campo", sino que encaja a la perfección con algo tan urbano como el rap, herramienta muy poderosa para visibilizar su gran diversidad en el territorio.

Solenco comenzó a interesarse por el aragonés desde pequeño, cuando escuchaba en su pueblo palabras que le llamaban la atención. Comenzó a investigar y decididó apuntarse a clases para aprenderlo. Para el disco, ha contado con la colaboración de la Asociación Cultural Nogará Religada, cuyos miembros Silvia Cebolla, Fernando Romanos y Cherardo Callejón se han encargado de ayudarle con el proceso de corrección de los textos. 

Dub, reggae, dulzainas y otros instrumentos y canciones tradicionales de Aragón se dan cita en este disco pionero, para acompañar letras en aragonés que hablan de cosas cotidianas en las que se rodea de otros profesionales del sector. Ellos son Helenn Peach, vocalista con influencias del jazz, el reggae, el soul y la bosanova y colaboradora de la cuarta canción del disco, 'Pagar de present'; Ypsen (Erik García), Mc y beatmaker de Zaragoza y colaborador en 'Fendo o tato', es el productor del disco y miembro del grupo 'Ypsen & Krevi' junto a Krevi y Dj Diamond Ex (Jesús Liarte), también Mc y Dj de Zaragoza que se ha encargado de los scratchings de las canciones; Monsieur leCrêpe (Juantxo Arakama), vocalista de Glaukoma y colaborador de la octava canción del disco, 'Zañak Irakiten'.

Respecto al diseño del disco y su imagen gráfica, es obra de Alba Carroquino, artista y diseñadora gráfica; El Ciervo Pálido, agencia de publicidad de Utebo, se ha encargado de los videoclips que, hasta la fecha se han publicado. Carlos Estella y José Manuel Huertas, técnicos de sonido del Laboratorio Audiovisual del Ayuntamiento de Zaragoza y, por último, Lacasia de la música, desde donde ha trabajado Sergio Lacasia, encargado de grabar el disco, de los arreglos en las producciones y el autor de dos de ellas.