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El Compromiso de Caspe incorpora novedades

El pregón oficial correrá a cargo de la Compromisaria de Honor 2019, la periodista Cristina Pardo

ARAGÓN CULTURA /

La localidad zaragozana de Caspe celebrará este fin de semana  la recreación del Compromiso de Caspe, que este año incorpora novedades tanto en su acto central como en las farsas satíricas que se desarrollan en los distintos barrios caspolinos.

Según la organización, lo más destacable de la fiesta es que habrá novedades en la recreación dramatizada del Compromiso, en el acto central el sábado por la noche, que incluirá sorpresas en el guión. Asimismo, se llevarán a cabo cinco farsas nuevas en los barrios, para dar "aire fresco" a esta recreación. En esta edición también aumenta la participación de actores al incrementarse las representaciones.

Entre las farsas y la obra central, rondaran alrededor de 300 participantes entre los actores amateurs, gente del pueblo que tiene mucho mérito, y los recreacionistas de Caspe y de otras partes de España que acuden al municipio para colaborar en la fiesta.

El viernes, 28 de junio, comenzará el programa de actos, cuyo pregón oficial correrá a cargo de la Compromisaria de Honor 2019, la periodista Cristina Pardo. La presentadora ha sido elegida por su vinculación a Maella por parte de su familia paterna.

HISTORIA DEL COMPROMISO

El pasaje más conocido de la Historia de Caspe se remonta a 1412. Es el famosísimo y decisivo Compromiso o Sentencia de Caspe, y para entender mejor el hecho histórico tenemos que viajar hasta 1410, al momento de la muerte del rey de Aragón Martín I, conocido como “El Humano”.

En efecto, al morir este rey sin descendientes legítimos la sucesión al Trono presentaba un problema: demasiados candidatos que reclamaban sus derechos y demasiado riesgo de una guerra civil y una situación de caos, anarquía, desórdenes y pillaje. Era lo habitual en la época y todo hacía presagiar que entonces no iba a haber una excepción.

Pero la hubo. Nueve hombres versados en leyes, tres por cada uno de los principales brazos del Reino: Aragón, Valencia y los Condados Catalanes, se reunirían para decidir con su voto y a fuerza de diálogo y ley cuál de los candidatos que alegaban sus derechos a la Corona sería el más legítimo para ocuparlo.

El elegido resultó ser un infante castellano de la Casa de los Trastámara con ascendencia aragonesa: Fernando I de Aragón, abuelo de Fernando el Católico. El poder de las armas y la fuerza bruta, en Caspe se transformó en el poder de la palabra y la convicción. Casi nada en un mundo regido por las guerras y la sangre.Eso cambiaría para siempre la historia de España, la situación de Europa y el destino de todo el mundo hispánico, pero ésa, amigos, es otra historia…

(Fuente: caspe.es - web municipal)