'Cuando el mundo empezó', mitos y leyendas del Pirineo en el Espacio Salto de Roldán

Desde el 27 de marzo, el Espacio Salto Roldán de Sabayés acoge la exposición itinerante 'Cuando el mundo empezó… mitos y leyendas del Pirineo', una propuesta que expone de forma amena y atractiva las construcciones mitológicas que han forjado la identidad simbólica del espacio pirenaico.

Esta iniciativa constituye una acción común de los socios del proyecto de Cooperación transfronteriza Red Pirenaica de Centros de Patrimonio e Innovación Rural PATRIM+, cuyo objetivo es estudiar y valorar los Pirineos como un conjunto cultural.

El Espacio Salto de Roldán actúa como punto de partida de varias rutas que recorren los atractivos paisajísticos, culturales, patrimoniales y naturales de esta zona de la Comarca de la Hoya de Huesca.

Santa Eulalia de la Peña

También popularmente llamada Santolarieta, está situada a 1.060 metros de altura y es la población más alta de la Comarca de la Hoya de Huesca. Destaca por sus maravillosas vistas y su caserío amoldado a la irregularidad del terreno. Pasear por sus calles es sumergirse en un viaje al pasado, ya que su arquitectura no ha cambiado en los dos últimos siglos.

Desde Santolarieta parten varias excursiones muy interesantes como la que lleva hasta el Salto de Roldán o hasta un abrigo rupestre y varios pozos de nieve. Cabe mencionar su cementerio, en el que destaca el crismón románico de la puerta y una maravillosa cruz de piedra tallada.

Sabayés

Sabayés es un bonito pueblo en lo alto de una colina a los pies de la sierra el que el visitante puede encontrar mucho elementos interesantes como sus famosas bodegas abandonadas, la iglesia parroquial de San Andrés con una imponente torre campanario vestigio de una antigua fortaleza de montaña, restos de un castillo de época iberorromana y posteriormente reconstruido por Pedro I, casas de sillarejo de familias nobles de otra época cubiertas con lajas de piedra y otras con arcos de medio punto como dovelaje de entrada, muy características del siglo XVIII.

Entre las construcciones que recuerdan la vida de sociedades pasadas, se conservan la fuente de los huertos con sus dos caños, el abrevadero, el lavadero y la antigua balsa que todavía abastece de agua los pocos huertos que quedan. 

El Salto de Roldán

Visita obligada e inexcusable para todo aquel que pise este territorio. Se trata de un espacio natural protegido compuesto por dos enormes moles rocosas de más de 300m, la Peña San Miguel y la Peña Amán, separadas por el río Flumen. El Salto de Roldán, cuyo nombre proviene de la mítica leyenda en la que el caballero Roldán saltaba de una roca a otra con su caballo mientras huía de sus atacantes, es un espacio natural con una enorme importancia histórica y una gran riqueza patrimonial, natural y paisajística.

Pozos de Nieve

Cerca de Santa Eulalia de la Peña en dirección norte se encuentran varios pozos de nieve. Un pozo de hielo o nieve es una construcción cuya finalidad era la de almacenar el hielo y la nieve del invierno para su conservación y uso durante los meses del verano. El nevero tiene forma cilíndrica y está construido en mampostería aparejada en seco.

Ermita de ordás

Es una de las ermitas más curiosas de la zona, enclavada en lo alto de la montaña y al abrigo del Castillo de Ordás. Sus orígenes datan del siglo XII pero ha tenido varias fases constructivas, por lo que es posible encontrar diferentes estilos como su portada románica o arcos apuntados góticos. 

Dolmen de Belsué

Situado en un pequeño collado del valle del Flumen, el dolmen de Belsué es un monumento megalítico que hace referencia a todas las manifestaciones constructivas de carácter sepulcral o monumental funerario del Neolítico. El dolmen tiene dimensiones de 1,75 m de longitud y 1,40 m de anchura aproximadamente, su construcción está orientada hacia el sureste. Durante muchos años sirvió a los pastores de la época para guardar leña sin que se mojase.

Túneles de Cinfuens

Partiendo de la apresa de Belsué se encuentran una serie de túneles que componen un paseo con el río Flumen a la izquierda y los imponentes acantiladados de Cienfuens a la derecha. Estos túneles se hicieron para construir la presa justo debajo de la de Belsué y unos años más moderna. Su objetivo era hacer de tapón hidráulico con el fin de aplacar las filtraciones que se producían en el anterior pantano.