"Contigo no", los más odiados de Hollywood

Si eres uno de los que se queda hasta el final de una película y lee atentamente los títulos de crédito, verás que cada película es un trabajo de equipo. Pues bien, hay gente con la que gran parte de Hollywood no soporta trabajar. 

Leonardo DiCaprio

Leonardo di Caprio, un genio de la actuación. Tiene fama de difícil porque algunos compañeros dicen que tiene mucho ego, va de estrella y carece de sentido del humor, algo que no podemos corroborar porque no hemos tenido la suerte o, por lo visto, la mala suerte de trabajar con él. A pesar de todo la cámara lo quiere gracias a un gran talento y una gran capacidad de trabajo que lleva desarrollando desde que le vimos en pantalla de muy crío como un secundario de Los problemas crecen.

En Titanic, su gran salto internacional, Jack, un joven artista, gana en una partida de cartas un pasaje para viajar a América en el Titanic, el transatlántico más grande y seguro jamás construido. A bordo conoce a Rose, una joven de una buena familia venida a menos que va a contraer un matrimonio de conveniencia con Cal, un millonario engreído a quien sólo interesa el prestigioso apellido de su prometida. Jack y Rose se enamoran, pero el prometido y la madre de ella ponen todo tipo de trabas a su relación. Mientras, el gigantesco y lujoso transatlántico se aproxima hacia un inmenso iceberg.

Christian Bale

Otro actor de gran calidad, con el que la gente duda de si trabajar o no en sus proyectos es Christian Bale. En el caso de Bale encontramos opiniones para todos los gustos. Hace un tiempo surgió una grabación que se había producido durante el rodaje de Terminator 4. En ella Bale se volvía loco porque una persona pasaba andando por detrás de la zona de cámaras. En cuatro minutos pudo lanzar 37 insultos diferentes. Posteriormente se disculpó, pero se ha ganado una fama de difícil que otros compañeros se han encargado de negar diciendo que fue algo puntual y que tiene un gran sentido del humor.

En 'El Caballero Oscuro', Batman regresa para continuar su guerra contra el crimen. Con la ayuda del teniente Jim Gordon y del Fiscal del Distrito Harvey Dent, Batman se propone destruir el crimen organizado en la ciudad de Gotham. El triunvirato demuestra su eficacia, pero, de repente, aparece Joker, un nuevo criminal que desencadena el caos y tiene aterrados a los ciudadanos.

Mel Gibson

El que también fue, como se dice popularmente, un "bocachancla" fue Mel Gibson. Él mismo reconoce que tiene un mal temperamento. Al parecer, el actor pierde los nervios cada vez que algo no sale como él quiere, estallando con mucha violencia. Además, también se ha hecho famoso por unos insultos racistas hacia un compañero de trabajo, lo que le sirvió para ganarse la fama de antisemita. Todos estos hechos se hicieron públicos cuando, tras el éxito de Braveheart, decidió dar un doble salto con tirabuzón con proyectos como Apocalypto y La Pasión, rodadas en Maya la primera y en Arameo, Latín y Hebreo la segunda… como para que algo no salga algo bien en el rodaje.

En Braveheart nos situamos en el siglo XIV, los escoceses viven oprimidos por los gravosos tributos y las injustas leyes impuestas por los ingleses. William Wallace es un joven escocés que regresa a su tierra después de muchos años de ausencia. Siendo un niño, toda su familia fue asesinada por los ingleses, razón por la cual se fue a vivir lejos con un tío suyo.

Julia Roberts

Otra que tiene su genio y sus cosas de estrellita es, por lo que cuentan, Julia Roberts. Aunque en Notting Hill hacía el papel de una estrella de cine que lo único que quería era una vida real, parece que Roberts es un poco tiquismiquis con los sets en los que le toca trabajar. Al parecer, el carácter de la Roberts es tal que consiguió que cambiases las tuberías del hotel en el que se alojaba durante la grabación de “The Mexican” y es bien conocido que el director Steven Spielberg y el equipo entero de “Hook” terminaron hasta el moño de la actriz y eso que su papel de campanilla era bastante breve.

En Notting Hill, William, tranquilo propietario de una pequeña librería de viajes en el popular barrio londinense, conoce un día por casualidad a la famosa Anna Scott, la estrella más rutilante del firmamento cinematográfico actual. Desde el momento en que la actriz entra en su tienda, la vida de William empezará a cambiar.

Gwyneth Paltrow

Si bien a Julia Roberts no le afectan demasiado sus caprichos a la hora de encontrar buenos proyectos, a nuestra siguiente protagonista le ha supuesto una fama que, a pesar de tener un Oscar en su haber, le ha impedido llegar a guiones donde demostrar su capacidad con papeles importantes. 

Sus últimos proyectos están relacionados con el universo Marvel, aunque no sé si continuará en la franquicia con las nuevas fases en marcha ya que, al final del rodaje de Iron Man 2 nadie podía verla. La actriz mostró una animadversión hacia Scarlet Johansson que hizo que ese mal rollo se extendiera al resto del equipo. Sí, continúo con las películas de Marvel hasta terminar la fase, pero cada vez con menos peso.

En 'Shakespeare in love' estamos en Londres, 1593, reinado de Isabel I Tudor. William Shakespeare, joven dramaturgo de gran talento, necesita urgentemente poner fin a la mala racha por la que está pasando su carrera. Por más que lo intenta y, a pesar de la presión de los productores y de los dueños de salas de teatro, no consigue concentrarse en su nueva obra: "Romeo y Ethel, la hija del pirata". Lo que Will necesita es una musa y la encontrará en la bella Lady Viola, con la que mantiene un romance secreto. Ahora bien, ella guarda dos secretos que él debe descubrir.

Hay otros casos muy conocidos como la insufrible Katherine Heigl o el gran Marlon Brando cuyos textos en El padrino tenía que llevar escritos Robert Duvall porque no quería aprenderse el texto… son divos y divas… grandes actores y actrices… pero lo de buenos compañeros… menos mal que no nos afecta su resultado en pantalla.